dilluns, 25 de gener del 2010

Rimas y leyendas

ALBERT GABARRI GONZÁLEZ (RIMA LXVI, VII, LEYENDA LOS OJOS VERDES.)

RIMA LXVI

¿De dónde vengo?... El más horrible y áspero
de los senderos busca;
las huellas de unos pies ensangrentados
sobre la roca dura;
los despojos de un alma hecha jirones
en las zarzas agudas,
te dirán el camino
que conduce a mi cuna.
¿Adónde voy? El más sombrío y triste
de los páramos cruza,
valle de eternas nieves y de eternas
melancólicas brumas;
en donde esté una piedra solitaria
sin inscripción alguna,
donde habite el olvido,
allí estará mi tumba.

La rima LXVI pertenece a la cuarta, en la que un sentimiento de dolor y angustia se proyecta sobre la condición humana, la muerte, la pregunta sobre la inmortalidad.
También cabe destacar que la obra de Bécquer se sitúa en la corriente pos romántica, la cual se caracteriza por su sencillez, melancolía…; observable en los temas, vocabulario...










Rima VII

Del salón en el ángulo oscuro,
de su dueña tal vez olvidada,
silenciosa y cubierta de polvo,
veíase el arpa.

¡Cuánta nota dormía en sus cuerdas,
como el pájaro duerme en las ramas,
esperando la mano de nieve
que sabe arrancarlas!


¡Ay!, pensé: ¡cuántas veces el genio
así duerme en el fondo del alma
y una voz como Lázaro espera
que le diga: «Levántate y anda»!





En esta rima podemos encontrar, el arpa olvidada como un genio olvidado, una mano de nieve como esa voz del lazaro, de la cual depende el genio para ser despertado.


LEYENDA:
Los ojos verdes
En está leyenda vemos como Don fernando de Argensola hiere a un ciervo, el qual aún estando herido huye.El montero de Fernando ordena al tropel que vayan tras el animal para no permitir su huida cruzando la Fuente ya que si no lo tendran que dejar huir.
El animal cruza y se detienen, al llegar Don Fernando habla con Iñigo para saber porque san detenido, el le explica que nadie se atreve a cruzar porque en la fuente hay un espiritu maligno. Esto hace que Fernando se ria por su respuesta y decide ir tras su trofeo .
Durante los siguientes días Don Fernando canvia mucho apenas habla, coje su ballesta si adentra en el bosque y vuelve al anocher y sin ninguna presa. En realidad lo q le pasa es que su ballesta no sirve para cazar a la dueña de esos ojos verdes que ha cntemplado en la fuente, y el cazador ignora que es el el que esta apunto de ser cazado.

1 comentari:

  1. Si miras el título del blog te darás cuenta de que has publicado el trabajo de castellano en el de catalán

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